Grupo de investigación en Biología de la Neurodegeneración y el Envejecimiento
El Grupo de Investigación en la Biología de la Neurodegeneración y el Envejecimiento investiga las bases biológicas que fomentan la aparición y el progreso del Alzheimer y otras enfermedades relacionadas con el envejecimiento.
Sus objetivos son tres:
- entender los procesos relacionados en el envejecimiento que determinan la progresiva neurodegeneración observada en el Alzheimer;
- proponer nuevos marcadores que se puedan usar para el diagnóstico y pronóstico del Alzheimer;
- proponer y validar en modelos preclínicos nuevas estrategias terapéuticas basadas en los mecanismos biológicos del envejecimiento que puedan ser útiles por el Alzheimer.
Líneas de investigación
Caracterización de nuevos marcadores de senescencia
Se ha demostrado que la acumulación de células senescentes juega un papel importante en el envejecimiento y, sobre todo, las enfermedades relacionadas, como por ejemplo el Alzheimer. Las hipótesis actuales proponen que la presencia exagerada de células senescentes en el cerebro genera un microentorno favorable a la acumulación de agregados y la progresión de la neurodegeneración que define el Alzheimer. Por lo tanto, marcadores que permitan detectar la presencia de células senescentes en el cerebro podrían servir para predecir el riesgo a desarrollar el Alzheimer y medir la rapidez de progresión de la enfermedad. Utilizando una mezcla de modelos animales y muestras clínicas, y aplicando las tecnologías ómicas más avanzadas, buscamos marcadores en sangre y líquido cefalorraquídeo que sirvan como medida de los cambios que aparecen en el cerebro con Alzheimer.
Definición de nuevas posibilidades terapéuticas para el Alzheimer
Descubrir que las células senescentes juegan un papel importante en el progreso de la enfermedad de Alzheimer abre nuevas posibilidades terapéuticas. A través de los marcadores de senescencia descritos en el laboratorio y las herramientas que hemos estado desarrollando (que incluyen desde nuevos fármacos a nanopartículas, anticuerpos e incluso intervenciones dietéticas), podemos proponer nuevos tratamientos dirigidos a frenar el Alzheimer que podemos probar en modelos animales y también en estudios clínicos preliminares en pacientes.
