Niveles altos de la proteína TREM2, implicada en la respuesta inmunitaria en el cerebro, predicen un mejor pronóstico en pacientes con enfermedad de Alzheimer. Así lo describe un estudio internacional liderado por Christian Haass en la Universidad de Múnich y en el que participó como primer coautor Marc Suárez-Calvet, investigador del Barcelonaβeta Brain Research Center (BBRC), el centro de investigación de la Fundación Pasqual Maragall.
El estudio, publicado en la revista Science Traslational Medicine, es el primer estudio longitudinal en humanos después de numerosos resultados con animales. “Demostramos que aumentar la función de TREM2 es una valiosa diana terapéutica para frenar la progresión de la enfermedad de Alzheimer”, destaca el Dr. Suárez-Calvet.
La investigación se ha basado en el análisis en líquido cefalorraquídeo de TREM2 soluble (sTREM2), una proteína que se encuentra en la microglía, las células de la respuesta inmunitaria en el cerebro. Estas células se encargan de eliminar las proteínas perjudiciales en el cerebro (como por ejemplo la proteína b-amiloide que se acumula en el cerebro de los pacientes con enfermedad de Alzheimer) y los restos de las neuronas que mueren a causa de la enfermedad.
Durante una media de 4 años, se realizó un seguimiento de los pacientes en el que se compararon sus niveles de sTREM2 en líquido cefalorraquídeo con sus resultados en tests cognitivos y pruebas de neuroimagen. De esta manera, los científicos comprobaron que aquellos pacientes con unos mayores niveles basales de sTREM2 presentaban un menor deterioro cognitivo y menor atrofia en zonas del cerebro implicadas en la memoria, como el hipocampo.
El estudio confirma entonces que TREM2 es una importante diana terapéutica para la enfermedad. “La activación de esta proteína con fármacos se podrá estudiar en futuros ensayos clínicos, quizá no para curar la enfermedad, pero sí para frenar su evolución, igual que sucede en otras enfermedades crónicas”, explica el Dr. Suárez-Calvet.
La investigación ha sido liderada por la Universidad de Múnich (Ludwig-Maximilians Universität) y el Centro de Enfermedades Neurodegenerativas de Alemania (DZNE), en colaboración con la Universidad de Washington, la Universidad de Pensilvania y la Universidad de California.
Marc Suárez-Calvet, uno de los primeros autores del estudio, es miembro del Grupo de Investigación Clínica, Biomarcadores y Factores de Riesgo del BBRC, donde lidera una investigación sobre nuevos biomarcadores sanguíneos en enfermedades neurodegenerativas.
Sus trabajos de investigación realizados en Múnich continúan desde el BBRC, donde analiza la proteína TREM2 en participantes del Estudio Alfa, impulsado por “la Caixa”. El objetivo es descubrir si el papel de esta proteína es clave también para el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer en fases aún más tempranas, cuando todavía no se presentan síntomas.