La tesis de la Dra. Gemma Salvadó, titulada 'Detection of early cerebral amyloid-ß deposition by PET imaging and its downstream effects', ha sido reconocida en la II Edición del Premio Nacional a la mejor tesis doctoral de Diagnóstico basado en Imagen y Genómica. La Cátedra de la Fundación QUAES en la Universidad Politécnica de Valencia premia desde 2021 la mejor tesis que integre los ámbitos diagnósticos en Imagen y genómica, promoviendo así la excelencia en la investigación basada en la combinación de estas dos áreas con tanto de potencial en la investigación actual.
Gemma Salvadó se incorporó en 2017 como investigadora predoctoral en el grupo de Neuroimagen del BBRC, donde ha colaborado hasta 2021. Actualmente, continúa la investigación del Alzheimer en la Universidad de Lund (Suecia).
¿Qué significa para ti haber recibido este premio?
Es un honor recibir ese reconocimiento, para mí, pero también por toda la gente con la que he trabajado durante estos años y que me han ayudado a llegar hasta aquí. Especialmente, creo que también es un reconocimiento al trabajo que han realizado mis directores de tesis, el Dr. Juan Domingo Gispert y el Dr. José Luis Molinuevo, por haberme guiado todo ese tiempo. Sólo puedo decir que se lo agradezco mucho a ellos y a todos los investigadores del Barcelonabeta Brain Research Center por todos estos años que ha durado este viaje. El premio sólo es la constatación del trabajo bien realizado por todas las partes.
¿Podrías contarnos de qué trata tu tesis?
Mi tesis se ha centrado en estudiar las fases más iniciales o fase preclínica de la enfermedad de Alzheimer. Por eso, nos hemos servido de los datos que nos proporcionan nuestros participantes del estudio ALFA, impulsado por la Fundación "la Caixa", y de los que estamos tan agradecidos. Más concretamente, he investigado diferentes facetas de una técnica de imagen técnica llamada PET (por sus siglas en inglés, Positron Emission Tomography), con la que podemos observar si y cómo se empieza a acumular una proteína llamada amiloide, una de las causantes de esta enfermedad. En nuestros estudios hemos visto que esta técnica puede ser utilizada en etapas muy iniciales para poder medir esta acumulación de amiloide tanto utilizando métodos de medida más usados en investigación, como la cuantificación, así como con métodos más dirigidas a la clínica, como la valoración visual de las imágenes. Una vez vimos cómo esta acumulación incipiente podía ser medida con esta técnica, también observamos cómo la acumulación de esta proteína, el amiloide, estaba ligada con otros procesos que pasan en el cerebro, como la neuroinflamación, incluso en estas etapas tan iniciales. Por último, nos centramos en estudiar ciertos factores de riesgo de la enfermedad, como la edad o algún componente genético, y pudimos mostrar cómo pueden modificar esta acumulación de amiloide en el cerebro.
¿Cómo encaras tu nueva etapa como investigadora? ¿Qué planes de futuro te esperan?
Actualmente estoy siguiendo mi carrera investigadora en la Universidad de Lund (Suecia), donde sigo trabajando en la investigación en Alzheimer. Creo que es una muy buena oportunidad para poder seguir aprendiendo y creciendo como investigadora, a la vez que trabajo con otros investigadores punteros en el campo. Y espero que dentro de un tiempo pueda llevar todo este conocimiento a “casa” y seguir investigando desde aquí, pero aportando más experiencia y colaboraciones.